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Octava Noche del Poncho 2011
La octava luna de la Fiesta Nacional del Poncho presentó dos propuestas que mantuvieron el clima festivaleros y que estuvieron centralizada en la puesta en escena que efectuaron el catamarqueño Emilio Morales y el santiagueño Dúo Coplanacu, que pusieron de pie a la buena presencia de público que se dio cita el viernes por la noche.
Con un repertorio basado en temas netamente catamarqueños, el joven cantautor local confirmó su permanente crecimiento como artista con una sólido y compacto show, que incluyó la actuación de artistas invitados.
Con el característico acompañamiento del público coreando cada una de sus interpretaciones, Morales compartió con exponentes del interior provincial como el recreído Víctor Godoy (La Paceña) y el belicho Pascual Gutiérrez (La Belicha), además de efectuar un repaso de las principales canciones de su última producción discográfica Sos Todo Eso y Algo Más. Como era lógico, se despidió con una marcada ovación.
Sin dudas, el otro momento fuerte de la noche fue la presencia de Julio Paz y Roberto Cantos, el Dúo Coplanacu, que con su clásico repertorio cargado de chacareras, huaynos y zambas no tardaron en levantar el clima festivalero y mantenerlo hasta el final. Entre a Mi Pago, El Quenero, fueron algunas de las más aplaudidas.
También subió al escenario mayor con una buena propuesta la cuyana Claudio Pirán, que incluyó un homenaje a la Virgen del Valle; el conjunto La Troya (encabezado por Aldo Rodríguez), y el notable humor del tinogasteño radicado en Caleta Olivia, Ale Ayame. También actuaron Noelia Tula, la Delegación de Formosa, El Embrujo y Juan Lapacho, que puso en escena un show típico del ciclo que conduce, que es El otro Folclore.
También se destacaron los Ballet Huellas Norteñas conducido por el profesor Héctor Berrondo; y la Escuela Piriqui Pérez, a cargo del profesor Oscar Pérez.
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